Stairs towards the glory

La carrera enloquecida que se larga al abrirse la puerta del subte es uno de los grandes momentos del día, con solo un pantallazo rápido del panorama podes ver el porte de tus oponentes y saber a ciencia cierta cuan dura va a ser la pelea.

Tengo memorizados un par de lugares justos (vagón y puerta a abrir) como para arrancar con ventaja, obsesión que creí única, la mayoría de los casos me demuestra lo contrario, todos en el vagón sabemos que la salida desemboca justo, por ejemplo, en la puerta del medio. Ahí entra otro factor para el triunfo, el de ganar sigilosamente la salida sin que nadie se apropincué por delante.

Recuerdo una ocasión en que un contrincante me conoció de pelearla todos los días nomás y me ganó parándose frente a la puerta tres estaciones antes de bajar.

Hoy después de una carrera sin igual le gané en la estación Florida (sin dudas, la mas difícil), a por lo menos diez personas, la subida saltando los peldaños de dos en dos al estilo Rocky Campeón habrá sido a las once de la mañana, todavía no se me borra la sonrisa.

Prisoner in my city

Hoy después de años puse un disco de los redo’, cuando los parlantes empezaron a cantar “y ahora tiro yo porque me toca...”, pensé que a veces el indio no toca lo de mañana, si no mas bien lo escribe.

“Una tragedia es tragedia cuando se me ocurren un millón de chistes negros y no me animo a decir ninguno”
Bill Johnston

High tide and the shell of your mother

El fin de semana pasado fuimos al tigre con mi amigo personal Apo, mi mujer Virginia y una amiga, Ivanna. Los motivos de la ida al delta eran tres: tomar hectolitros de mojito, comer un buen asado y como última actividad y dejándolo para el final, tal vez por la importancia del acto, entrometernos en en los misterios de la cerveza artesanal.

Alentados por el arrastre femenino de Hans y no sabiendo mas de el que aquello que escribe en su blog, nos propusimos empezar como empezó el, o sea, manufacturando una bebida.

Apo aporto el capital y la logística, o sea todo. Yo me prendí y al final laburamos los dos como negros (laburo de negros: dicese de las personas que trabajan más de siete horas).

Todos los pasos se cumplieron a la perfección salvo el de pasarla de 120 grados a 30 en 20 minutos. (Se aceptan donaciones de serpentinas de cobre). La pusimos en el lugar más oscuro y nos volvimos el domingo.

Hoy a la mañana por Messenger:
Apo: bad news
Yo: dámelas rápido
Apo: Se inundo el Tigre, un metro y medio de agua, es la primera vez que pasa en diez años.
Yo: la cerveza???? ... (¿Hay una pregunta más estúpida que esa?)
Apo: imaginate…un metro y medio de agua...

Nunca voy a ser un playboy, ni un long play diria Braulio, hoy mi ánimo se inundo con once litros.

I

-Yo anduve en una camioneta con una mujer y su novio, el manejaba, ella me hacia caricias en la cabeza.

-Yo nunca había tocado un instrumento en vivo y lo toque por primera vez en un escenario de diez metros delante de cuatrocientas personas en brasil.

-Yo iba a clases a caballo

-Yo era el que viajaba llorisqueando en el 15 cuando la radio del colectivo anunció que Harrison había muerto.

-Yo jugué al loto y al quini tres años y nunca gané nada.

-Yo tengo una madre que tiene un baúl con todas las revistas Humor.

-Yo no se hacer globos con el chicle.